sábado, 10 de octubre de 2009

MOGWAI 5 - LOS PLANETAS 0

Yo no debería estar aquí, escribiendo esto... Y esto ya lo he escrito en alguna otra ocasión, tengo la sensación de no hacer lo que debo, de elegir el momento menos oportuno y sepultar mi vida entre cosas prescindibles.

En este sábado por la mañana debería hacer los equipos del SM, era lo que tocaba, la competición empieza esta tarde y yo con estos pelos, literal. Pero es que tengo que poner en orden mi cabeza, si el zumbido de oídos me lo permite.

Viernes 9 de octubre, Sala Multiusos de Zaragoza, primera jornada del FIZ 2009. Un cartel que es una incógnita. Los Planetas, Sunday Drivers, Love of Lesbians y Mogwai. Lo bueno empieza tarde, a partir de las once. ¿Tarde? Sí, en mis actuales circunstancias, lo es. Dudo entre ir o no ir, entre pagar los 40 euros de la entrada o no hacerlo, entre gastarme no sé cuánto más en cerveza, entre quedarme en el sofá o arreglarme y buscar la parada del bus, sortear los grupos de adolescentes que quieren quemar la noche pre-pilarista. Llamo a mi amigo Antonio a ver si él me empuja a salir. No lo hace. Me siento y reclino el sillón, empiezo a adormecerme mientras oigo de fondo a una tía que podría llevar un tiempo enterrada, diciendo que el que le salvó de una mano de hostias no era tan bueno. Y entonces ocurrió.

Un ángel con la cara de Jesús Mariñas se me acercó al oído y me susurró que Dios me pedía que fuera al concierto de Mogwai. Me levanto y ando, no me gustaría enfadar al mismísimo Dios DJ. Me visto de fizer, camisetica sin referencias musicales, no me gusta dar pistas, vaquero, zapatillas informales sin marca y una chaqueta de punto que me da un cierto aire de universitario repetidor bostoniano. Me despeino y salgo no sin antes echar un juramento: Breogán 72- CAI 63. Cuando se lo cuente al berbi...

A las once en punto estoy en las taquillas, dos billetitos y me regala un boleto para entrar al recinto que bien conozco y que normalmente hace que los grupos suenen como el culo. Pero si Dios me lo ha pedido... No me cachean, no parezco peligroso, si ellos supieran. Hay un montón de gente, más que otros años, todos son supermodernos, camisetas a cual más indie, despeinados estudiados, mucha barbita, gafa de pasta, bolsos atravesados. Son jóvenes y guapos, sobre todo las chicas. Huelen tan bien. ¿Por qué todos los modernos sonríen igual? Deben tener el mismo camello. Muchos parecen ser de fuera, gente que no llegó al FIB y se consuela con esto. En Zaragoza no hay tanta gente tan fashion. Si no me sudaran las manos, y supiera, me liaría un porrito. No se debe mezclar codeína, paracetamol y alcohol. Me temo que lo haré.

Han terminado Sunday Drivers, no he llegado ni a la nota final, tampoco me pena, a lo mejor me arrepiento algún día. Una muchedumbre de técnicos, auxiliares, asistentes... se afana en desmontar el set anterior y preparar los cacharros de los escoceses Mogwai. No los conozco, los he oído pero no he prestado mucha atención. Desde Escocia como enseñan las bufandas del Celtic de Glasgow que adornan los enormes amplis. En 30 minutos deben aparecer y enseñarme qué saben hacer. Me sitúo cerca del escenario, a la derecha. Me impresiona la cantidad de guitarras que tiene preparadas, no menos de quince. Me gustan los grupos que cambian de instrumento casi en cada canción, aunque lo suyo no sé si son canciones, no cantan. Expectación en aumento, calor y humo a partes iguales, empiezo a sudar con mi chaqueta anudada a la cintura. Litros de alcohol, olor a hierba y un montón de cámaras fotográficas. Se apagan las luces, quitan la música de ambiente y sueltan el humillo preceptivo sobre el escenario. Aplausos.

Salen cinco tipos, camisetas y vaqueros, feotones, uno pequeño y calvo que parece el jefe, otro con una gorrita como única concesión al glamour. Saludan, se sitúan en sus puestos, dos guitarras, bajo, batería y un teclado, comienza el show. Tardo poco en intuir lo que va a pasar, Dios no me ha engañado, es uno de esos momentos en los que te alegras de estar ahí, como aquella noche en el añorado Rincón de Goya, Manta Ray dejándome embobado y haciéndome peregrinar a la mañana siguiente a la tienda de discos, lo quiero todo de este grupo, como la tarde con Polar en la FNAC, como... Tres grupos con puntos de contacto, querencia por la música instrumental, los ambientes pegajosos, recurrentes, enfermizos, los desarrollos amplios y los cambios de ritmo, el estatismo en la escena, la falta de divismo, la huída de la afectación y el amaneramiento. Mogwai es todo eso elevado al cubo. M3. En diez minutos me han ganado para toda la vida.

El sonido es todo lo bueno que creo se puede conseguir en aquel antro poco preparado para el r´n´r. Estos tíos son una apisonadora. Es Michael Nyman y el minimalismo, con My Bloody Valentine, con death metal, los Cure más oscuros, Smashing Pumpkins, debe ser post-rock, slow core o la madre que los parió. Estuvimos bajo el mar, en un desierto, sobrevolando la luna, la muerte debe sonar así, es tan hermoso que da miedo. Y el ruido. Ruido. Ruido. Brutal. Un volumen al que nunca me había sometido, parece que es marca de la casa, me golpea el pecho y me envuelve la cabeza en miles de aguijonazos, me duele la tripa, me estallan los tímpanos, tengo ganas de huir y vomitar. Me dan miedo. Espero que hayan hecho caso a las recomendaciones de la OMS y los decibelios no vayan más allá de la locura. Acoplan y sonríen, juegan al Apocalipsis mientras nos han grapado los huevos al suelo de plástico, cerveza y cigarros. Nadie se mueve. A ratos tengo ganas de llorar. Es todo tan hermoso. Setenta y cinco minutos después todo estaba consumado.

Salgo afuera a respirar, tengo que mear y comprarme un litro de cerveza para esperar a Los Planetas. Hoy no tengo muchas ganas de verles, algo me dice que no saldrá bien. Me cambio de lado del escenario, me gusta estar cerca de Florent, el tipo del bajo cuyo nombre no recuerdo es tan aburrido... Más cerca que antes. A la hora convenida, más o menos, salen Eric, J y los demás. El público está entregado, creo que hay más gente aún que antes. Se les ve contentos, J con un barrigón indecente y cada día menos pelo. No espero novedades, nada nuevo en el mercado desde su anterior visita, el minutaje algo menor que lo acostumbrado, me temo se centrarán en el rollo flamenco por el que les ha dado últimamente. Es jodido salir a un escenario después de Mogwai. Las comparaciones. Se arrancan con San Juan de la Cruz, la voz de J en primer plano, casi irreconocible, prefiero que la enmascare detrás de las guitarras. Se confirma, el sonido pésimo, como la vez anterior en ese lugar. Suena plano, bajo, el teclado averiado. Todo me parece mentira ahora, hueco, convencional siendo benévolo. La cosa no mejora, los técnicos no ajustan, ya me muevo yo a ver si en otro sitio se escucha mejor. Negativo. La segunda es un adelanto de lo nuevo para el 2010, seguimos embarrancados en un homenaje a Manolo Caracol, lástima. La primera mitad del concierto lo podíamos haber tirado a la basura, ni con tres guitarras consiguen el 50% de la intensidad que acabamos de paladear.

Esta noche voy de público cabrón: No he dado ni un aplauso, prácticamente ni me muevo, pongo cara de aburrimiento que es lo que siento, a la mayoría le pasa lo mismo que a mí. Eso sí, los más acérrimos saltan y se mueven ignorantes del desastre, no lo ven, porque van ciegos, o no lo quieren ver, porque miran hacia otro lado. Los trajes me los compro yo, claro. La cosa remonta algo cuando echan mano de sus clásicos más recientes, parecen haber olvidado las cosas que nos hicieron enamorar, hasta muevo un poquito el pie y le sonrío a una tetona que me chafa su delantera en mi brazo izquierdo. El mejor momento cuando J en un alarde de comunicabilidad dedica la canción al capitalismo que nos ahoga, Devuélveme la pasta, puño izquierdo en alto mientras se fuma un cigarrito. Y no da para más. Deberían ver que no nos gusta lo que hacen ahora, a Florent se le estropea la guitarra ante al aplauso del respetable, que es difícil reinventarse pero que deberían volver a sus raíces y no me refiero al folklore. Irreproducible lo que le grita el de las gafitas número cincuenta y dos, y aire lánguido, que tengo al lado en este momento. Los que habían venido a un karaoke se pueden ir a su casa. Cae el telón entre la sensación de estafa.

Una chica me pide que grite con ella que toquen De viaje. Le digo que de viaje a su casa van ellos, han cumplido el contrato y si te he visto. Además, le grito, han sonado como el culo. Sí, es verdad, los de antes lo han hecho mejor. Vamos, no me jodas, Los Planetas van de bajada, mascullo mientras le dejo con la palabra en la boca y me largo a sentarme un rato en la entrada. Estoy dolido, soy el padre que exige a su hijo listo pero vago que saque nota en cono, y en junio. Sé que puedes. Llevamos muchos años de relación, muchos conciertos, muchos discos, nos hemos dado mucho placer pero rien ne va plus. Lo nuestro se acabó. Mañana, ahora que escribo esto, estaré mejor y recordaré vuestra última visita en la Oasis, con flamenco y todo sonasteis bien y hubo momentos de magia. Le echaré la culpa al local, un mal día. Puede que lo mío con Mogwai sea un polvo que estuvo bien, ya me pasó otras veces, y al final vuelva a casa y te pida perdón y nunca más y sí, te lo prometo. Yo también. Puede ser. Es música difícil y hay que encontrarle su momento.

Espero que haya un partido de vuelta, sé que aunque ahora no estéis inspirados os sobra talento para facturar al menos tres joyitas por disco, por infumable que sea. Espero que en ese partido salgáis a darlo todo y que se pueda remontar la eliminatoria. De momento, Glasgow nos ha ganado por goleada.

NOTA: De Love of Lesbian poco puedo decir. Buena actitud, ganas, el mal sonido mencionado. Las 3 A.M. es mala hora para casi todo. Parece un grupo con buenas letras, sonido con matices y currados vídeos. De esto, en el concierto, nada de nada, claro. Y es que a la tercera canción, cuando bajan la música para que el cantante reclame palmas y anime a hacer oh-oh-oh a la menguada parroquia, decido que me voy, esto es cosa de La oreja de Van Gogh y cosas así. Y estos tíos son mucho más feos. Lo siento por Rubentxo.


5 comentarios:

Rubentxo dijo...

Coño!
Hacía tiempo que no me leía una crónica de un concierto/festival desde el principio al final sin pestañear. Y va y al final salgo en ella y todo, jeje, qué güeno.
Qué ácida, tío, que realista, qué contra-pop.
Love of Lesbian es un grupo de festival, de pegar botes y echarse unas risas... Espero que no se estén volviendo/creyendo serios. En sus discos hay algunos ambientes/atmósferas muy interesantes y un par de frases brillantes.
Con Los Planetas (usted me perdonará) jamás he podido... Llegué tarde a ellos y nunca me engancharon. Estuve hace años en un par de conciertos nefastos que me indignaron y me prometí no intentarlo más.
Lo de Mogwai, me temo, no va a ser sólo un polvo pasajero... Hasta que la muerte os separe, ya verás.
Saludos, Jaloza.

Rob dijo...

Hi

I hope English is ok, my Spanish is very poor.

I run the Mogwai fansite Brightlight
Brightlight

I've linked to your review of last night's show. Do you know anyone who picked up a setlist?

http://www.youngteam.co.uk/brightlight/eng/gigs09.php

Rob

JALOZA dijo...

I am sorry, Rob. I do not know anybody who has the setlist. It yes, it was an impressive concert. Congratulation for your web. Regards

Rob dijo...

Thanks for the reply.
Please let me know if you find the setlist, photos? Or even better, a recording of the show!

Rob

JALOZA dijo...

Seat it, do not have photos, neither video... It was so impactado that forgot my mobile in the pocket.