domingo, 23 de noviembre de 2008

DE CIENTO A VIENTO.100 RELATOS DISTINTOS

Todo empezó hace unos años, despacio, como empiezan casi todas las cosas que merecen la pena.

Nos pusimos internet en casa, empezamos a escribir en un foro de baloncesto, cosas de la pelota, chascarrillos referidos al juego en el que participábamos. De vez en cuando dábamos rienda suelta a la imaginación y colocábamos un texto que nada tenía que ver con aquello, para pasmo e indignación de alguno. Que esto es un espacio serio, nada de literatura, por favor.

Mi amigo, J.M Morales "Berbi", el de El Rincón, un día colgó un relato que había escrito tiempo atrás. No sabía que te gustara la literatura. Yo tampoco. Seguimos escribiendo nuestras cosas, unas mejores, otras no tanto. La verdad es que fue un buen banco de pruebas, un modo de coger el gusto por la escritura, de probar el venenillo de pensar, redactar y plasmar historias.

Me dijo que deberíamos escribir un poco más en serio, sólo un poco, para aburrida ya está la oficina. Y así lo hicimos. El 14 de febrero de 2007 escribí mi primer relato como tal. Y luego otro, y otro, y otro... Quien lo ha probado, sabe lo que engancha. Yo le enseñaba mis escritos, él los suyos. Algunos amigos, amigas, se involucraron con nosotros y entraron en el círculo. Y la cosa fue creciendo. Ahora ya no la podemos parar.

Yo había leído mucho, tanto que ya no lo hago, pero nunca pensé en escribir, para qué, todo está dicho ya, insuperables Julio, Gabriel, Mario... y tantos otros. Nunca agradeceré lo bastante a mi amigo Berbi que me animara a seguir, que me enseñara el placer por la escritura. En los malos tiempos, la pluma y el papel, permitidme la metáfora, son la mejor medicina.

Deberíamos publicar un libro: Tú escribes cincuenta relatos y yo escribiré otros tantos. Le tomé por loco. Eso ya son palabras mayores. Me equivoqué. Menos de dos años después, ya lo tenemos hecho. Y registrado. Fue hermoso verlo crecer, pensar en su estructura, ir probando en distintos foros literarios, en webs en la que otros aprendices exponen sus tripas y buscan el cariño, una palabra amable, alguien que te diga que le gustó, que sigas por ahí, que no lo dejes...

Se llama "De Ciento a Viento. 100 relatos distintos". Lo hemos ofrecido a unas cuantas editoriales, a otros tanto agentes literarios, hemos participado en diversos concursos, hemos movido hilos y ovillos para desentramar el muro.

Estamos llegando al final del tunel.

Hemos aprendido de maquetación, de ediciones, de distribución, de encuadernación, de ISBN, códigos de barras, geltex y sobrecubiertas, de PVP y comisiones. De la ilusión y el desengaño. Para no mentir, mi amigo principalmente, el técnico, el motor del barco, el navegante por estos mares desconocidos. Yo no habría pasado de una mesa de café y un vino junto a unas cartillas manuscritas.

Hemos buscado lectores, compradores, campañas de publicidad, contactos, incursiones en los circuitos, animación a la lectura, la dramatizacion de los relatos, su puesta en escena. Y lo que queda.

Puede que no lleguen a ser 100, a lo mejor se quedan en 70, en 60. Pero de lo que no me cabe la menor duda es de que estos pequeños verán la luz como Dios manda. En papel y entre unas bonitas tapas. El camino ha merecido la pena. Soy feliz escribiendo. Y si algun día mi hijo, nuestros hijos, toman entre sus manos adultas el libro que un día escribieron sus padres, habremos ganado la batalla.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Y ahora ... ¿qué digo?. SEA.

Anónimo dijo...

MUCHO ANIMO Y ADELANTE QUE ESTAMOS MUY ORGULLOSOS.
FIRMADO:

TUS AMIGOS

Rubentxo dijo...

Eres feliz escribiendo y lo contagias.
Avisa de cuando esté todo listo.
¡¡¡YO quiero uno!!!
Saludos