En Sevilla a las cinco de la tarde de muchos días como hoy, la gente se arremolinaba en la plaza para ver a Curro Romero torear y aguardar el milagro.
En Zaragoza al mediodía he visto a un buen amigo tocar el tambor a cara descubierta proclamando que Cristo ha resucitado y que todos tus pecados te han sido perdonados.
En Huesca, bien de mañana, El Diario del AltoAragón publicaba la segunda parte del serial que cuenta las andanzas de una familia durante casi cien años sin soledad. Letras impregnadas de sentimiento religioso. O algo así.
3 comentarios:
O algo así... ¿porqué no has puesto un "continuará"? o parte 2 de 5 ...
Año prolífico sin dudas, me da gusto que estes publicando frecuentemente, espero proximamente un libro y no solo textos sueltos. Un saludo y espero tengas tiempo de darte una vuelta, deje algo que relaciona a Arreola con Cortázar y espero eso termine de animarte a leerlo.
Un abrazo enorme como siempre desde México.
Quizás Curro Romero resucitara,no le sé,yo siempre estaba pendiente de los tendidos, esperando que algún espontáneo saltará al ruedo y pidiera su minuto de gloria entre las luces de esos vestidos de seda, con la banda de música callada, el presidente con gesto enfurecido, las mujeres gritando ante ese loco que se lanzaba ante el animal con una chaqueta de color pardo. Y dejara en evidencia, con un solo pase perfecto, hondo y sentido, al maestro que vivía del dinero que le pagaban las revistas y los anuncios de televisión. Arte y rabia espontánea contra el funcionario del ministerio de suplemento artístico.
Abrazos
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